Ni el alba ni el ocaso

Nostalgica tarde de abril. Las calles desiertas, totalmente vacias ... un alma solitaria intenta salir de la eterna prision que le toca vivir, recluido en un vasto universo de mentiras, un mundo perfecto, desvaneciendose lentamente bajo la tenue penumbra de un fogozo amanecer.

Disminuido ante tanta belleza; mares y oceanos gritando en su nombre; hipnotizado frente a los mas preciosos ojos azules, perdido ante una mirada misteriosamente penetrante, profunda y silenciosa, descubriendo minuto a minuto cuando grande resulta el universo y cuan frivola es la propia existencia.

-".... No existen palabras para describir lo que siento... "- le confieza al oido, cerrando para siempre las puertas de su corazon ...

-".... Mirame de frente y dejame sanar tus heridas; sientete parte de mi, ahora somos la misma persona y ni el alba ni el ocaso podra separarnos ..."-